lunes, 12 de enero de 2009


Apareciste sin que te buscara nadie, no esperaba encontrarte ahí, tal vez tu risa no tenía sombra, no tenía cara: fue todo lo que ví. Me prestaste un beso, me prestaste calma, me prestaste todo lo que me faltaba. Tenés la receta justa para hacerme sonreír todo el tiempo, sabes lo que me asusta, sabes lo que me gusta estar con vos. Me robaste el cuerpo, me robaste el alma, ya es tuya la voz con la que antes cantaba. Me quitas el sueño, me quitas el habla pero si estoy con vos, no necesito nada.

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